Encima que les pagamos un buffet de S/ 80 no informan de manera adecuada en la semana de representación
Esta semana, los congresistas de la republica volvieron a demostrar que son parte de todo el problema que afronta el país, pues nos dimos con la sorpresa que, aprovechando los momentos de enfrentamiento entre peruanos, en diciembre del año pasado, aprobaron pagarse un suculento buffet de S/ 80, claro está, con plata de todos los peruanos.
Los almuerzos y cenas se elevaron de S/ 15.93 a S/ 80 y los desayunos de S/ 4.20 a S/ 31 soles. En un día de pleno en el Congreso, un legislador puede llegar a consumir S/. 190, solo en alimentación. Es decir, dar comidas a los 130 integrantes del legislativo puede salir alrededor de S/. 25 mil. Esta manera tan mezquina e insensible de aprovecharse de las circunstancias políticas y sociales tan graves que afrontamos, trató de ser defendido de manera torpe y desvergonzada por el congresista Montoya, ante los periodistas. “Lo que uno busca cuando hace un contrato es conseguir lo mejor de lo mejor. Querrán que comamos alfalfa seguramente. Lo que he observado es una mala intención en hacer el reportaje. Primero, se burlan de que se pida carne y pollo de primera calidad, ¿qué cosa quieren que se pida? ¿Comida de tercera? A la persona y al canal que ha hecho el reportaje les pregunto: ¿qué comen ustedes? Comida de tercera, seguramente. Para que hagan esa pregunta y se asombren, me imagino que deben estar por ese lado”, dijo sin ningún desparpajo.
LOS TRAGONES CUSQUEÑOS
Este escandaló que ahonda en la ilegitimidad de los congresistas, se resolvió con la semana de representación y los parlamentarios cusqueños, aprovecharon para hacer la finta que representan al pueblo que les dio su voto; sin embargo, estos “padres de la patria” escogieron los lugares más alejados y donde no tengan contacto con el pueblo, al que dicen representar, todo para esconderse del periodismo y evitar responder sobre su trabajo.
Uno de los “otorongos” más destacados en Cusco y no precisamente por su trabajo es Alejandro Soto del partido Alianza para el Progreso o “plata como cancha”, a quien esta semana de representación simplemente no le dio la gana de venir a Cusco. Pues fue uno de los que defendió el suculento buffet, a la salida del exclusivo comedor parlamentario, aunque después dijo que no había comido nada. “Es hora de refrigerar no y todos tenemos derecho a ello. No le podría decir si estaba contundente (la comida del buffet) o no, eso es algo que pasa por los que lo consumen (…) como le digo, he ido a ver, simplemente a ver, no (he comido) estoy con tratamiento médico. De lo que he visto, aparentemente está bueno”, dijo Soto, con cara de empachado, a los periodistas de Cuarto Poder cuando le consultaban sobre el buffet.
Para el congresista Soto, quien se hizo famoso a nivel nacional al señalar que “solo ganaba 10 mil soles” y daba a entender que eso no le alcanzaba para cubrir sus exigentes gastos, venir a Cusco, durante la semana de representación ya no es prioritario. Prefiere quedarse en Lima. Por esta razón, según las propias redes sociales que maneja Soto, el alcalde de Quispicahchi, Yamil Castillo Cusihuallpa, debió ir hasta la oficina del parlamentario para hacer coordinaciones, es decir, ahora deben buscarlo.
Otro de los parlamentarios que tiene sus exquisiteces es, Luis Ángel Aragón Carreño, quien para hacer la “finta” que sí está cumpliendo con su semana de representación, colgó fotos de sus visitas a Calca, Quispicanchi y Apurímac, donde incluso fue homenajeado. Para exigir el pago de viáticos por la semana de representación, el acciopopulista se ve obligado de hacer videos, para explicar dónde está y lo que hace, tal como sucedió en Ollantaytambo, lugar donde se refugió para escapar de las “atrevidas” preguntas que le haría la prensa. “Estamos en el ingreso del Camino Inca, después de habernos reunido con los dirigentes de las comunidades campesinas, con quienes trabajaremos una agenda de reactivación del turismo (…)”, indica el legislador en el video que colgó en sus redes sociales.
Lo que no mostró el acciopopulista en sus cuentas de Facebook es la manera en que fue “echado” del distrito de Huaro, en la provincia cusqueña de Quispicanchi. Con carteles en mano, los pobladores le hicieron sentir el repudio que tiene la población por los congresistas de la república. “Golpista, asesino, conchudo, inmoral, gana pan, cierre del congreso”, fueron algunos de los gritos en contra de Luis Aragón. Mientras que en los carteles se podía leer frases como: “Aragón no me representas”, “adelanto de elecciones”, “gobierno dictador y asesino”, “Luis Aragón el pueblo te repudia”, “cierre del congreso”, entre otros.
El comportamiento del chumbivilcano Guido Bellido Ugarte, es mucho más grave, pues este que se pintaba de gran protector del pueblo y que terminó siendo un aliado de Pedro Castillo, ahora prefiere ir hasta Loreto. Incluso visita los medios de comunicación y con estas visitas, justificará su semana de representación y por supuesto, cobrará los viáticos que tanto criticaba en campaña. Todo hace indicar que al popular “puka”, se le olvidó cómo que, al inicio de su mandato asistía a cuanta invitación le hacían en Cusco.
Cómo será de bueno el buffet del Congreso de la República que “puka” Bellido está más subido de peso que antes. Así lo demuestran las fotos que publicó en su cuenta de Facebook. Tal vez por su estado físico, ya no quiere venir a la altura cusqueña. Las imágenes nos muestran que ahora prefiere el cálido clima de Loreto, donde se reunió con las autoridades locales, mientras que sus votantes cusqueños se preguntan ¿Por qué nos ha abandonado?
En el caso de las congresistas mujeres, la situación no es muy distinta, pues las señoras, también tienen un apetito exquisito. Katy Ugarte, quien antes venia semanalmente a cusco para dar a conocer su supuesto trabajo, ahora prefiere pasar desapercibida y se reúne a puertas cerradas con otras autoridades, igual de cuestionadas que ella, como la alcaldesa de San Sebastián, Jackelin Jiménez Chuquitapa. Ni los propios profesores, colegas de Katy Ugarte, respaldan el trabajo de la parlamentaria y por eso, en lugar de visitar los centros educativos previo al inicio del año escolar, ha preferido representar al Cusco casi de manera clandestina, donde nadie le haga preguntas incomodas.
Por su parte la congresista Ruth Luque, también ha preferido caminar por las sombras durante esta semana de representación. Ha asistido a un par de reuniones con autoridades pero de manera cerrada, sin prensa. Su última aparición pública en Cusco le habría dejado una mala experiencia, pues fue botada de la Plaza Tupac Amaru, por los propios manifestantes a los que fue a entregarles víveres. Sin embargo, esta congresista que a diario pide adelanto de elecciones y luego vota en contra, se animó a hablar de su suculento buffet que goza los días de pleno, tal como se ve en las imágenes del programa Cuarto Poder. “Yo presente un carta a la presidente del Congreso de la República para que se explique todos estos gastos que son de 200 soles por congresista. Yo no tenía detalles del monto que significada para cada pleno. Las justificaciones de algunos congresistas son vergonzosas y pido disculpas, corresponde una mayor empatía política (…). He planteado a la mesa directiva que cada congresista asuma el costo de su alimentación”, dijo en una entrevista nacional.
Así estamos representados todos los cusqueños, con parlamentarios bien gorditos de poder y también de alimentos, como sabemos ahora. Veremos si en las próximas semanas de representación, los parlamentarios vienen al Cusco y dan la cara, como hacían en campaña para pedir los votos del pueblo, al mismo que ahora, no quieren ni ver.