Especialista pide comunicación entre padres e hijos para evitar estas circunstancias
El reciente hallazgo de Leonor al interior de un hospedaje luego de que su familia y Policía lo busque por más de cinco días de ser reportada como desaparecida en la provincia de Espinar, enciende nuevamente las alertas para ver que pasa al interior de los hogares y es que en menos de un mes dos menores de edad aparentemente salieron de sus viviendas por problemas que tenían con sus progenitoras.
JAYLI
El pasado 24 de febrero Jayli salió de su domicilio en Espinar dejando dos cartas; en una decía que se iba por voluntad propia debido a que no quería “hacer renegar mas a su mamá”, sin embargo, una segunda nota generó preocupación debido a que en esta señalaba que estaba siendo amenazada y para evitar exponer a su familia al peligro, tomaba la decisión de salir de su vivienda.
El temor crecía más en los padres de Jayli tras conocer que ella mantenía una comunicación fluida con un adulto que había creado una cuenta falsa para mantener una amistad por lo que incluso se dispuso una prisión preventiva contra el sujeto para garantizar las investigaciones. Jayli fue buscada intensamente incluso se llegó a ofrecer una recompensa de 20 mil soles para quien brinde información sobre su paradero. Los familiares dejaban entrever que había sido secuestrada.
Después de 21 días (17 de marzo), la menor de 12 años apareció en la ciudad de Juliaca – Puno, el caso no está cerrado hasta determinar que ocasionó la desaparición de la menor.
LEONOR
Semanas después la menor Leonor de 13 años fue reportada como desaparecida, su hermana mayor, dirigente estudiantil de la Federación Universitaria del Cusco (FUC) pedía apoyo de la colectividad cusqueña y es que la adolescente salió de su domicilio rumbo al colegio, lugar al cual no llegó. En este caso la familia también manejaba la hipótesis de que Leonor pudo haber sido secuestrada por lo que pedían la rápida intervención de la Policía, institución a la cual acusaron de no hacer nada respecto a la denuncia.
No obstante, los efectivos de la Comisaria de Espinar se defendieron y en frente de toda una población que marchaba para exigir justicia por la desaparición de Leonela, se develaba que la menor días antes de su desaparición había tenido un intercambio de palabras con su madre, debido a que esta última le decomiso el celular porque permanecía mucho tiempo con el equipo móvil conversando mediante chats; además explicaron que la menor al salir de su colegio llegaba tarde a su domicilio. Con estas develaciones también surgía otra hipótesis de que la menor salió de su domicilio por voluntad propia.
Después de una semana de búsqueda la menor que era intensamente buscada fue hallada en un hospedaje en el distrito de Wanchaq – Cusco, es ahí donde se conoció que la menor salió de su vivienda con 2 mil soles aproximadamente. Al parecer, con este dinero habría costeado su viaje y estadía.
Según la menor, decidió huir de casa debido a “diferencias en su entorno familiar”; manifestó incluso no querer regresar a su hogar.
ETAPA COMPLICADA
Este semanario converso con el Psicólogo Alain Madueño respecto al comportamiento de estas adolescentes cuyas actitudes son propias de esta etapa. “Una de las características de la adolescencia justamente es el sentir de irritabilidad y lo que se confunde como rebeldía. El adolescente es mas irritable e impulsivo en sus reacciones, entonces a veces cree que ya tiene el pensamiento como un adulto y es ahí que hace cosas como un adulto lo cual al final le crea problemas; por ejemplo, el querer irme de casa, querer estudiar y trabajar. Es el pensamiento que ellos tienen pero ese es un pensamiento que esta fuera de la realidad, entonces ante cualquier problema en casa o maltrato de papá o mamá que se puede dar en cualquier hogar, ellos lo toman como algo fuerte o que les hace perder su identidad y es ahí donde quieren escaparse” señalo el especialista.
Además, recomendó que haya bastante comunicación entre padres e hijos para evitar este tipo de circunstancias.