Se evidenció que la Universidad Austral del Cusco incumplió con las condiciones básicas
Hasta el momento la Superintendencia Nacional de Educación Superior Universitaria (Sunedu), resolvió otorgar licencia de funcionamiento institucional a 82 universidades del país entre públicas y privadas. A otras 24 universidades y a una escuela de Postgrado se les denegó y continúan en evaluación 39 casas de estudios superiores de las 145 que presentaron sus solicitudes. Así informó la vocera de la Sunedu, Diana Milla, quien señaló que al término de este año se concluirá con la valoración correspondiente. El procedimiento de evaluación comprende tres etapas, la revisión documentaria, la verificación presencial y la etapa resolutiva. “Todas las universidades públicas y privadas a nivel nacional conocen cuáles son estas condiciones objetivas que van a ser materia de evaluación y evidentemente es todo un estudio técnico que se encarga de evaluar la solicitud que presentan las universidades”, explicó la vocera de la Sunedu. Con respecto a la reciente resolución que deniega la licencia a la Universidad Austral del Cusco, la funcionaria, explicó que esta universidad no cumplió con las condiciones básicas
en la educación superior establecidas en la norma, por lo que alrededor de 900 estudiantes deberán buscar nuevas opciones para terminar sus estudios superiores. Además precisaron que no se trata de discriminación en el proceso como dejaron entrever los representantes de esta universidad. Dentro de las observaciones la SUNEDU mencionó en su informe que: no cuenta con objetivos estratégicos que contribuyan al logro de sus planes estratégicos y de gestión de calidad. Asimismo, sus documentos de planificación evidenciaron inconsistencias, no se encontraron actividades orientadas a generar un diagnóstico o línea base que sirva para identificar oportunidades de mejora, y el presupuesto asignado para las diferentes tareas presentadas. La casa de estudios presenta deficiencias en sus planes de estudio y no cuenta con una propuesta de estudio consistente y definido; lo que genera problemas en su gestión académica y carencia de seguridad para sus estudiantes sobre el proceso formativo que siguen. De igual manera no demostró contar con los instrumentos de gestión adecuados en seguridad y salud que garanticen el bienestar de
los estudiantes, docentes y personal administrativo en las instalaciones de la universidad. No tiene mecanismos que garanticen la calidad de las investigaciones que se realizan en la universidad. Se evidencio que la universidad incumple con su propia normativa relativa a los procesos de evaluación y ratificación de docentes. La SUNEDU constató que utiliza diferentes criterios de evaluación y que estos están desarticulados, esto origina que el cuerpo docente no tenga información suficiente para saber cómo es evaluado ni sobre los procesos de ratificación. Del mismo modo no evidenció contar con un proceso planificado para la formulación de las capacitaciones docentes, ni un presupuesto desagregado que permita evaluar los montos asignados para cada actividad programada. Se detectaron inconsistencias en la planificación de actividades, asignación y ejecución de presupuestos, lo que impide garantizar la continuidad y sostenibilidad de los servicios complementarios y el acceso a estos por parte de la comunidad universitaria. Los mayores problemas se dan en la Unidad de Servicios de Salud, Servicios Sociales, la Unidad
de Psicopedagogía, y en el desarrollo de la política medioambiental. Se identificó que los planes de seguimiento a los graduados presentan inconsistencias en su diseño y no están debidamente articulados al presupuesto. Por otra parte no se halló evidencias de la ejecución de prácticas profesionales. En el caso de las prácticas pre profesionales solo se encontró a un estudiante beneficiado por los convenios suscritos por la universidad, lo cual demuestra que no logró implementar mecanismos de inserción laboral que faciliten la empleabilidad de sus estudiantes y egresados. “En el caso de la Universidad Austral se recibió un informe desfavorable de la etapa de verificación presencial. Como consecuencia de esto formuló un plan de adecuación que luego también informó su cumplimiento y a propósito de ello se realizó una diligencia de actuación probatoria hasta en dos oportunidades para verificar el cumplimiento de las condiciones básicas de calidad. Sin embargo, pese al desarrollo de este procedimiento que se ha realizado por un plazo de más de 2 años no logró cumplir con las condiciones básicas de calidad”, finalizó Diana Milla.