Estudio realizado en ruinas incas establece que ‘piedra’ fue armada en santuario del Cusco cuando aún estaba blanda.
Las grandes rocas con las que fueron construidas las ruinas de Sacsayhuamán, en el Cusco, no son naturales sino artificiales, según un estudio realizado por científicos rusos a pedido del Ministerio de Cultura del Perú.
La investigación fue realizada en el 2012 por un equipo encabezado por el el geólogo ruso Andrey Verianov, quien en julio de ese año envió los resultados al director regional de Cultura del Cusco, David Ugarte Vega Centeno, con el rótulo de ‘confidencial’.
Diez años después del descubrimiento, extrañamente, los resultados no han sido divulgados oficialmente en el Perú, aunque Verianov afirma haber recibido reconocimiento en otros países como Rusia, España y Estados Unidos.
La historia, como se ha dicho, empezó en julio de 2012, cuando el Ministerio de Cultura coordinó con geólogos del Instituto de Geofísica e Investigaciones del Mar de Moscú (VNIISMI) un escaneo del subsuelo del complejo arqueológico de Sacsayhuamán, debido a la peligrosa erosión del terreno.
El equipo que realizó la investigación, encabezado por Andrey Verianov, estuvo integrado por Alexandr Drosdov e Igor Alexev, además de Ramón Sotomayor. El arqueólogo Luis Guevara y la geóloga Edith Quirquihuaña Zavala participaron como asesores del INC del Cusco.
Uno de los resultados del estudio es sorprendente: «El complejo arqueológico Sacsayhuamán presenta dos tipos de bloques: A y B. Los bloques tipo A que se encuentran en el primer nivel están hechos de una cantidad de rocas y un caparazón que los cubría del material analizado».
Luego agrega: «Ya que los niveles superiores no recibían tanto peso, sus bloque fueron hechos enteramente del material analizado», es decir la roca artificial.
El documento menciona:
«Se escanearon los bloques de las bases del primer nivel, con pequeñas antenas de alta frecuencia, descubriendo que son rocas de baja densidad, cubiertas con un cascarón artificial, esto nos motivó a enviar las muestras para el análisis químico correspondiente».